jueves, 29 de marzo de 2018

Dos semanitas en Italia: Roma de leyenda III


Cuando fueron ya grandecitos el pastor les contó toda la historia. Obviamente Rómulo y Remo hicieron lo que cualquier leyenda que se precie de tal indicaría: asesinaron a su tío abuelo, liberaron a su abuelo y lo reinstauraron en el trono de Alba Longa.
Parece que, a pesar de haber pasado unos cuántos años en prisión, el abuelo de Rómulo y Remo poseía una salud de hierro y que no daba señales de ir a estirar la pata necesitar un sucesor pronto. Por su parte, los hermanos -sabiendo ahora de su noble origen- querían reinar. Así que, repitiendo la historia de su tatara-tatara-tatara abuelo Ascanio, partieron de Alba Longa para fundar su propio reino. De nuevo, no se alejaron tantísimo… Decidieron que fundarían su ciudad en donde habían sido encontrados por el pastor. Sí, allí donde la loba (y el pájaro carpintero) los habían protegido.
Claro que no había forma de saber cuál era el lugar exacto y, además, por motivos estratégicos, era mejor fundar la ciudad en lo alto de una colina y no en lo profundo del valle. Ambos hermanos exploraron la zona y, por primera vez, tuvieron una diferencia. Rómulo quería fundar la ciudad sobre el Monte Palatino y llamarla Roma. Remo quería fundarla sobre el Aventino y llamarla Remoria. Remoria, qué nombre, por favor…
Como hoy la capital de Italia se llama Roma y no Remoria imaginarán que Rómulo se salió con la suya. ¿Cómo hizo? Fácil. Los hermanos no sabían quién había nacido antes y quién después, por lo que tuvieron que buscar otro método para decidir quién realizaría sus planes y quien sería el segundón. Decidieron que quién viera la mayor cantidad de buitres al día siguiente sería el afortunado. Ganó Rómulo por goleada. Doce a seis. Rómulo fundó Roma y decidió que mientras se efectuara la consagración de la ciudad nadie podría entrar en ella.
Nuevo momento de tensión y nuevo cliché. Remo lo desafía, viola la ceremonia de consagración y termina batiéndose a duelo con Rómulo. Rómulo lo hiere y al poco tiempo Remo muere producto de las heridas... Sin más contendientes a la vista Rómulo termina la fundación de la ciudad y se dispone a gobernarla.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡¡¡FESTIN DE FOTOS!!! MAS,MAS,MAS...

Historia de Segundo año dijo...

Jajaja... Bastante complejo fue elegir las fotos para acompañar las entradas de Italia. El cielo azul y las ciudades mismas hacen que la tarea sea doblemente ardua. Igual,creo que de Roma en total va a haber pa' tirar al techo.